Como ya hemos comentado reiteradamente desde estas páginas, el stock de viviendas vacías no es lo que parece y buena parte de la cifra total de viviendas vacías no debería ser tenida en cuenta en el análisis de la futura evolución del mercado por diferentes factores. Para empezar, un 35% de la obra nueva pendiente de vender son segundas residencias que no deberían afectar el mercado de primera residencia. Por otra parte muchas de las promociones a la venta, en algunos casos inacabadas, no tienen opciones de ser vendidas y serán demolidas. Se trata de promociones ubicadas en lugares sin interés comercial o con unos estándares constructivos que cuando se reactiven las ventas no podrán ser consideradas como de obra nueva ni mucho menos. Al menos, así lo reconocía Enric Reyna ya hace meses y así lo prevé la SAREB que ya ha planificado demoliciones de sus promociones inacabadas.